Calle Florida del 2010
Lo siento,soy tan antiguo, “adulto mayor “ dirian quienes todavía no aceptaron que estamos muy grandes, que todavia no me acostumbro a que la Capital Federal
Me impresiona como si después de casi 73 años, pasara a llamarme Antonio , Edelmiro o Eduardo, abandonando el Fernando, que me acompaña desde que naci.Cosas del siglo XXI al que todavía estoy digiriendo.
Me llevaron a la ciudad, varios tramites , asi como una charla, que nos debiamos con uno de mis hijos.
Caminando por la calle Florida , desde Cangallo hasta Cordoba, perdon , nuevamente, todavía no puedo reemplazar a Cangallo por un Presidente , miraba como recien llegado llegado de tierra adentro , tanto las tiendas, el transito enloquecido de las calles transversales , el incesante fluir de peatones y los varios idiomas que contribuian al extraño sentimiento de ajenidad que me embargaba.
Cuantas caras grises, macilentas, apuradas , sin despegar el infaltable celular de la oreja, sin mirar a su alrededor, en su propio mundo, sin registrar al projimo, mas alla de dar o recibir un pisoton en el tumulto desordenado.
Y alli estaba Florida, que alguna vez fue simbolo de paqueteria, de tomar el te en “ la Richmond ”, de Gath y Chaves y Harrods, mirando cómo, en aras del gentio y las ojotas, nos quedamos sin tradiciones , casi sin historia , con relojes y cinturones en la calle, sobre una manta y reinando por sobre nuestras cabezas, el “cuarto de libra con queso “.
Almorce con Martin y volvi caminando. Esta vez por Reconquista, que ahora es peatonal, “ mismo parte, mismo castigo” decian en la Armada cuando yo era chico, esto significa el mismo entorno triste y gris que encontre en Florida, pa´ pior, ( para peor, por si algun hermano de habla hispana no entendiese la ironia).
Mirando pensativo el ir y venir de nativos y turistas, trataba de imaginar alguno de esos rostros , con sus ojos cerrados , relajados, en una sesion de Reiki. Confieso que , ni aun con la mejor buena voluntad , pude trasladarlos de la fiebre del microcentro , al cuarto donde doy Reiki.
Por mas esfuerzos que hice , no logre imaginarlos en ese ambiente en el que flota habitualmente, el aroma del aceite de bambu o de lemon grass, que despide el hornito que uso para calentarlos.
Donde estaba la musica de Vangelis- 1492 , mi preferida para dejarnos llevar por su magia dejando la mente casi en blanco. Cómo dejar de lado los ruidos y olores de la gran ciudad , como apartarnos del hacinamiento y encontrar nuestro propio espacio . Es difícil responder estas inquietudes.
Sali de la cueva y como hacia tiempo que no hacia, volvi al mundo real , del subterraneo ( el Metro en buen romance) , Plaza Mayo y el centro de la ciudad , todavía estoy tratando de enfocarme ,después del desequilibrio de un dia citadino.
Y asi , un paso detrás del otro, sin apuro y sin darme cuenta, llegue a Plaza de Mayo, ansiando reencontrar la vida casi provinciana , que descubri hace 22 años, a solo 50 km de la Capital ( ¡ ufa! sigo olvidando a la Ciudad Autonoma
A esta altura y como siempre , el Señor se hizo presente, a pocos metros se levantaba , inconmovible , la Catedral Metropolitana
Decidi entrar, buscando la armonia perdida .
“ Los lugares que ejercen un influjo armonizador o vitalizador sobre el hombre, o que amplian su conciencia, se denominan lugares de poder positivos.
Un sitio de poder es un lugar donde la energía fluye de una manera mágica, especial, las personas que pueden ver la energía en estos sitios la describen como un remolino ascendente, también se ha llamado vórtice energético.
Generalmente estos sitios están ubicados en lugares particulares, algunos son donde la naturaleza se mantiene en estado puro, virgen, otros donde antiguamente se celebraron rituales o ceremonias sagradas, otros son lugares misteriosos y míticos que muestran un lenguaje ancestral oculto, que ahora está a comenzado a salir a la luz y a conocerse. “
Walter Lubeck
Reiki del Arco Iris
Camine por la Catedral , visite el Mausoleo del Gral. San Martin y me sente en un banco a meditar unos minutos , fueron suficientes para centrarme y salir al suave sol de abril para volver renovado a Escobar y a la cueva.
Si me animo y no los canso, una vez por semana les contare mas de mi vida, menos sesuda y mas calida que las entradas hechas hasta hoy.
Fernando.
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